Como era de esperarse el Cardenal Juan Luis Cipriani, se pronunció sobre el caso Gálvez - García. Y lo hizo para unirse al coro de personas, mayoritario dicho sea de paso, que condena el agravio (lo llamó corrupto) del jóven Richard Gálvez al doctor Alan García.
Sin embargo la condena del Cardenal ha sido sesgada, insuficiente, de parte. No ha dicho nada de la cachetada que, según testigos, propinara García a Gálvez. Tampoco ha dicho nada de la patraña y mentiras montadas para desviar el caso. Mucho menos el Cardenal Cipriani ha expresado su opinión sobre la golpiza abusiva que miembros de la guardia presidencial dieran al joven insultador. De eso Cipriani no ha dicho nada. Si sabemos que su fuerte no es precisamente los derechos humanos, bien habría hecho en mejor quedarse callado.
2 comentarios:
Con esas declaraciones Cipriani se me cayó más abajo de lo que ya se me había caído. Según él, digo yo, Gálvez lo que debe hacer es ponerle la otra mejilla a Alan para que este le zampe otro cachetadón. Este cura sí que está desvariando.
Bueno, el comentario puede haber sido sesgado, correcto, es una opinión personal. Sin embargo, también hay sesgo de tu parte cuando relacionas esto con aquello otro de lo de los derechos humanos, que no es mas que una "leyenda negra" que es excusa para los ataques de los mismos intolerantes anticlericales que exigen tolerancia. No mides con la misma vara.
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