domingo, 18 de abril de 2010

Sérvulo Gutiérrez, el gran olvidado de la entrevista de Tealdo con Orson Welles

En la foto: al medio Sérvulo, Doris Gibson, Lourdes y su esposo Alfonso Tealdo con el cura de Ancón

He tenido la oportunidad de leer, en el suplemento Domingo de La República, una buena crónica sobre la legendaria entrevista que le hace Don Alfonso Tealdo al gran actor Orson Welles. La misma reproduce lo publicado en el blog Garganta Profunda, nombre emblemático en el periodismo, administrado por el taller de periodismo de la UPC.


Sobre la referida crónica, sin embargo, hay unos detalles que quisiera recordar.



Otro de los protagonistas de la célebre entrevista a Orson Welles habría sido el gran pintor iqueño Sérvulo Gutiérrez. En un reportaje de gran calidad , publicado en los inicios de La República, se menciona este detalle que no puede pasar desapercibido respecto a la entrevista. Dada la categoría de los tres personajes, Orson Welles, Sérvulo Gutierrez y Alfonso Tealdo, no es difícil decir que la entrevista adquiere categoría de toda una leyenda.


Cito de memoria, a continuación, lo que leí hace años en La República.


Concertada la entrevista, Alfonso Tealdo sale rumbo al hotel Bolívar encontrándose en el camino con Sérvulo Gutiérrez, su gran amigo, quien se iba, por el jr. de la Unión al Maury. Le pide que lo acompañe a entrevistar a Orson Welles. Ya en el hotel de la Plaza San Martín no pudo suceder nada mejor para el trío que la entrevista se realice en el bar del Bolívar. Pidieron una gran cantidad de catedrales (pisco sour doble) y tanto Sérvulo como Tealdo (grandes bebedores) se asombraron de la cantidad de vasos que tomaba el colosal Orson Welles. En un momento determinado, y cosa lógica por los efectos del pisco y el tiempo, perdieron la noción de los acontecimientos. Todo se convirtió en una nebulosa hasta que, al día siguiente, Tealdo y Sérvulo, amanecen tirados, durmiendo en los jardines de la Plaza Manco Cápac en La Victoria. Tealdo, preocupado, lo primero que hace es ir a un kiosco a comprar el diario La Prensa para ver la entrevista, si es que había cumplido o no, tranquilizándose cuando la ve, perfecta, en la página central. No quedaba otra cosa que celebrar, ya no en el Bolívar sino en el Maury, a donde se dirigieron presurosos, empujados por la garúa que suele caer en Lima los inviernos al mediodía.


Hasta allí lo que recuerdo. Como es obvio al haber contado esta anécdota tantas veces a amigos periodistas, políticos, la misma puede haberse enriquecido con algunos detalles. En todo caso bien valdría la pena que los estudiantes de periodismo de la UPC o de otra universidad se den un salto por la hemeroteca para que investiguen el transfondo de una entrevista que, por lo bella, es realmente una leyenda.

3 comentarios:

Pedro Tierra dijo...

Dudo que algun alumno de la UPC sepa quiénes fueron Sérvulo y Orson Welles.

Anónimo dijo...

Grande Juan, te escuché la anécdota en el Queirolo de Pueblo Libre hace aaaaaaaños, pero al igual que Pedro tierra dudo mucho que un chico de la UPC o de otra universidad sepan quien fue servulo gutiérrez. tu blog, maravilloso!!!

Mario

Anónimo dijo...

Sèrvulo, Sèrvulo, SEEEEEEEEEEERVULO, un grande entre grandes, que sì estuvo con tealdo y orson welles, error de los chicos de la UPC.