martes, 21 de abril de 2009

Cortando la pita por el lado más débil: la disponibilidad de la CTS

Es muy fácil - y cruel- incentivar el consumo con dinero ajeno. Eso parecen pensar algunas empresas que encuentran en algunos congresistas a los vehículos que les permiten llevar a puerto sus propuestas mercantilistas.
El gobierno, en lugar de proteger al trabajador lo desampara. La crisis económica se está acercando con mucha fuerza y los despidos arreciarán. Cuando llegue ese momento el trabajador se encontrará sin Compensación por Tiempo de Servicios y con una deuda gigantesca encima.
Se sabe que detrás de esta medida del gobierno y el Congreso estarían fuertes presiones empresariales para levantar la ya alicaída campaña de ventas por el Día de la Madre. De allí la necesidad de sacar cuanto antes la libre disponibilidad de la CTS y de allí el coro de opinantes que están a favor de este recurso extremo.
El gobierno opta así por "pichicatear" la economía (término ya usado por Perú Económico en el primer gobierno de Alan García) a costa de los más vulnerables, los trabajadores, en lugar de tomar medidas que involucren a las empresas y al propio Poder Ejecutivo.
¿Por qué no pensar en un aumento del Salario Mínimo Vital? ¿Por qué no aumentar a profesores y jubilados? ¿Por qué no disminuir los impuestos? ¿Por qué es buena la disponibilidad de la CTS y no la exoneración de impuestos a las gratificaciones?
Ese es el asunto de fondo, el de tener para mal del Perú a un gobierno, como el aprista, rehén de algunos intereses económicos.

1 comentario:

Luis Enrique Alvizuri dijo...

Señor Sheput:

Lamentablemente con el Perú sirve perfectamente el refrán "Piensa mal y acertarás".

Desde que me hice adulto esa ha sido la norma que me ha permitido desenvolverme con relativo éxito en nuestro país, pues es así cómo he descubierto siempre qué hay detrás de todo.

Ayer me preguntaba por qué existía controversia dentro del gobierno para aplicar "de un plumazo" la norma del CTS y, usando mi método, descubrí por lo menos dos cosas.

En primer lugar, es una manera de poner en circulación el dinero (para nada existe el interés en la persona, en el trabajador). Y en segundo lugar, que creo que es el factor ´álgido en cuestión, que muchas de las grandes empresas que dirigen a Alan (los amigos de la Confiep) sencillamente NO HAN DEPOSITADO NUNCA LA CTS, y por un monto de millones.

Menudo problema que tiene el gobierno.

Muchas gracias.