Todo lo bueno que ha podido mostrar hasta la fecha el presidente Alan García, es en buena cuenta herencia del gobierno del presidente Alejandro Toledo: reservas internacionales, ALC-UE, APEC, interoceánicas, exportaciones crecientes. Pasado dos años y medio el gobierno del Dr. García, aparte de romuleadas y manipulación de medios de comunicación, no tiene mayor cosa que exhibir. Es prioritario entonces buscar algo.
Salió entonces de la chistera presidencial la Teletón, evento anual que se hace en favor del Hogar Clínica San Juan de Dios, que, por diversas razones, se encuentra sin fondos. El gobierno, a través del presidente García, emprenderá una cruzada en beneficio de aquellas personas humildes que sufren de algún tipo de discapacidad.
Nos preguntamos ¿Quién administrará el dinero que se recaude? ¿Serán los mismos que administraron los fondos y donaciones que vinieron del sector público y privado en favor de los damnificados del terremoto de Pisco y que hasta hoy no han cumplido con ellos? La indignación en Pisco es generalizada. Nadie sabe qué se ha hecho con tanto dinero y bienes donados.
Es obvio que el presidente García no sabe que hacer para llamar la atención. Hay que llenar de titulares la paupérrima agenda presidencial, aunque sea de los medios amigos, aquellos que siempre encontarán en la gobernabilidad el pretexto adecuado para encubrir torpezas o negociados.
A decir de Juan Paredes Castro, la ópera bufa encuentra de qué nutrirse. En este caso de una teletón que tendría mejores resultados si fuera conducida sin ánimo de aprovechamiento político.
Salió entonces de la chistera presidencial la Teletón, evento anual que se hace en favor del Hogar Clínica San Juan de Dios, que, por diversas razones, se encuentra sin fondos. El gobierno, a través del presidente García, emprenderá una cruzada en beneficio de aquellas personas humildes que sufren de algún tipo de discapacidad.
Nos preguntamos ¿Quién administrará el dinero que se recaude? ¿Serán los mismos que administraron los fondos y donaciones que vinieron del sector público y privado en favor de los damnificados del terremoto de Pisco y que hasta hoy no han cumplido con ellos? La indignación en Pisco es generalizada. Nadie sabe qué se ha hecho con tanto dinero y bienes donados.
Es obvio que el presidente García no sabe que hacer para llamar la atención. Hay que llenar de titulares la paupérrima agenda presidencial, aunque sea de los medios amigos, aquellos que siempre encontarán en la gobernabilidad el pretexto adecuado para encubrir torpezas o negociados.
A decir de Juan Paredes Castro, la ópera bufa encuentra de qué nutrirse. En este caso de una teletón que tendría mejores resultados si fuera conducida sin ánimo de aprovechamiento político.
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