Davi Kopenawa, voz de los indígenas yanomamis, lucha para que en Brasil no ocurra lo que en Perú. Su comunidad vive amenazada. Es una vergüenza que por culpa de la ambición de consorcios chileno-peruanos se pretenda deforestar la Selva Amazónica. Nuestro país así se ha convertido en un mal referente para una modernidad que tiene en la defensa de la biodiversidad, los bosques tropicales y el respeto por las culturas un emblema de desarrollo.
El País ha publicado en su edición dominical la lucha del pueblo yanomani para que no ocurra en Brasil lo que ha pasado en Perú. Se quiere impedir el uso salvaje de las tierras por parte de cultivadores de soya, sembríos para biocombustibles o explotación petrolera.
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2 comentarios:
A diferencia de la supuesta defensa brasilera,cuando en el extranjero se habla del Amazonas creen que este rio nace y se desarrolla en el pais carioca,somos los peruanos que viajamos por el muundo que explicamos que este majestuosa mar ribereno,tiene corriente tiene Olas y llega el momento de la navegacion que no se divisa tierra,el rio Nanay de agua dulce se pierde y confunde en la distancia para ser usado por otros Gobiernos que se benefician de su cause,faltando recursos hidricos en el Peru,debiendos canalizar por lo menos un brazo y hacer una represa hidroelectrica seguimos sentados en un banco de oro y donde se navega y transporta Contrabando y Cocaina.
Pero la gran verdad es que en la selva del Brasil ya todo lo que pasa en la selva peruana paso hace tiempo, esa selva esta completamente calata, y los que se benefician son como en el Peru, ilegales, informales y marginales que viven explotando la selva sin ningun criterio. Los nativos peruanos cavaron su propio fin al descartar estos decretos, ya que con lo que hay ahora, la selva pierde y pierde terreno a velocidades brasileras.
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