Como dice mi amigo Edwin de Nauseapolítica, la columna del día de hoy de César Hildebrandt es tajante y contundente. De ella quisiera rescatar, por lo preocupante, la parte que se refiere a que "....el aprismo lumpen está dispuesto a todo con tal de acallarme y, según me dicen fuentes judiciales amigas, se alista una batería de juicios “por difamación y calumnia” que me entablarían Cárdenas y algunos de sus compinches". Es decir los denunciados apristas por la vergonzosa ley dada en el Congreso enjuiciarían a César.
Pobres diablos.
El estilo mafioso consiste en enjuiciar a quien demanda. El mensaje es "si sabes algo cállate o te meto preso" y así están actuando con una serie de personas que podrían ser colaboradores eficaces.
En forma diaria recibo una serie de denuncias anónimas de lo que se viene perpetrando en la adminiestración pública a todo nivel. Es la corrupción generalizada. Lamentablemente no tengo los recursos como para comprobar las denuncias y separar las que son verdaderas de las que son distractivas.
Uno de estos casos aparece el día de hoy en Perú 21. Una asociación ligada a Enrique Cornejo, Ministro de Transportes, estaría contratando con el Estado. Me pregunto ¿es la única? ¿quién investiga a IDICE entidad parásita que tiene en ESSALUD a su hospedador? por ejemplo.
Lo cierto es que en estos momentos el Estado es el paraíso del Faenón. No hay SNIP, ni CONSUCODE, ni Contralor, tampoco fiscalización y pocas unidades de investigación en medios de comunicación. Así que no nos extrañe que estemos a mitad de otro quinquenio desperdiciado por culpa de la corrupción.
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