¿Qué pasa con la FAP?

La FAP, la Fuerza Aérea del Perú, pasa una vez más por momentos de vergüenza. Nos enteramos, por los medios de comunicación, que con sumisión se han dedicado a entregar el Aeródromo de Collique. A veces pareciera que hemos vuelto a los tiempos del fujimontesinismo, donde los elesvanes bellos se dedicaban a ser simples tramitadores de la mafia.

Por mucho menos, por el Pentagonito, se movilizaron generales del Ejército para evitar el corrupto remate. Por el Aeródromo de Collique ni uno sólo de los varios y numerosos generales de la FAP dice nada. No quieren perder sus posiciones de privilegio. No quieren enemistarse con el poder de turno. Prefieren la comodidad aunque sea sin dignidad.

El Aeródromo de Collique es útil para la formación de pilotos, necesario para la Defensa nacional, constituye eje importante de la reserva militar peruana. Pero el Aeródromo de Collique, donado por la civilidad a la Nación peruana, hoy se ha rematado a un grupo peruano-chileno, sin que la Fuerza Aérea del Perú diga nada.

Por eso nos preguntamos ¿Qué pasa con la FAP?

Sabemos que la corrupción ha vuelto al país por todo lo alto. Al igual que durante el fujimontesinismo cuenta con una red mediática dedicada a desinformar, ocultar y manipular. Por eso se mantiene en el ostracismo la captura corrupta de Collique, ante lo cual, repito la FAP no dice nada.

Habría que recordarle a los señores aviadores cómo nace Collique. La población sensibilizada por la hazaña heroica de José Abelardo Quiñones decidió hacer una colecta y dotar al país de un Aeródromo donde se formen pilotos de aviación. Abelardo Quiñones héroe máximo de la Fuerza Aérea del Perú hasta ha perdido el aeropeuerto que llevaba su nombre pues se ha privatizado, y la FAP?, bien gracias.

Lo que está pasando con la FAP es en verdad vergonzoso.