¿Quién o quiénes se benefician más con el estéril debate sobre el aumento de sueldo a los ministros? Pues los ministros acusados de corrupción y el propio Alan García, cuyo entorno liga el desenlace de Rómulo León a él.
La idea es distraernos de un asunto político que tiene que ver con la corrupción, tan ligada a Alan García en sus dos gobiernos. En esta semana la Comisión de Investigación que preside el congresista Daniel Abugattás tendría que poner de conocimiento del pleno del Congreso y de la opinión pública los resultados de su investigación. Según adelanta La República, estarían involucrados en indicios de corrupción varios ministros, entre ellos Carlos Vallejos, Hernán Garrido Lecca y Jorge del Castillo. Pero el debate del informe pondría de nuevo en la agenda la participación de Alan García en los encuentros de Rómulo León y Fortunato Canaán de allí la desesperación por desviar la atención.
Es por eso que con gran desconocimiento del tema, periodistas oficialistas o emisoras oficiosas como RPP o Radio Capital, se dedican a levantar y lanzar falsas informaciones sobre los antecedentes de los sueldos de los ministros, con el objeto de dar vida al falso debate, ese que desvía y atonta, y que, por extensión, le da forma de faenón a los propósitos desinformadores del régimen.
Y que se siga discutiendo sobre el aumento de sueldos a los ministros. Alan García cumple así con dos objetivos: achicharrar a Yehude Simon por una parte y desviarnos de las conclusiones de la Comisión Abugattás por otra. Y todo con la colaboración entusiasta de algunos ingenuos.
La idea es distraernos de un asunto político que tiene que ver con la corrupción, tan ligada a Alan García en sus dos gobiernos. En esta semana la Comisión de Investigación que preside el congresista Daniel Abugattás tendría que poner de conocimiento del pleno del Congreso y de la opinión pública los resultados de su investigación. Según adelanta La República, estarían involucrados en indicios de corrupción varios ministros, entre ellos Carlos Vallejos, Hernán Garrido Lecca y Jorge del Castillo. Pero el debate del informe pondría de nuevo en la agenda la participación de Alan García en los encuentros de Rómulo León y Fortunato Canaán de allí la desesperación por desviar la atención.
Es por eso que con gran desconocimiento del tema, periodistas oficialistas o emisoras oficiosas como RPP o Radio Capital, se dedican a levantar y lanzar falsas informaciones sobre los antecedentes de los sueldos de los ministros, con el objeto de dar vida al falso debate, ese que desvía y atonta, y que, por extensión, le da forma de faenón a los propósitos desinformadores del régimen.
Y que se siga discutiendo sobre el aumento de sueldos a los ministros. Alan García cumple así con dos objetivos: achicharrar a Yehude Simon por una parte y desviarnos de las conclusiones de la Comisión Abugattás por otra. Y todo con la colaboración entusiasta de algunos ingenuos.
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