No dudo que algún día, algún tesista de ciencias sociales, escribirá sobre la forma en que se hacen las políticas públicas en tiempos de Alan García.
No hay desgracia o necesidad que no sea aprovechada para una oportunidad de negocio. Podríamos dar varios ejemplos, desde aquellas que se forjan en Palacio de Gobierno como la planta desalinizadora de agua hasta la más reciente, el SOAT Médico.
La irresponsabilidad de Alan García, su poca reflexión y un Consejo de Ministros que nunca se opone a los designios supremos de un presidente siempre dispuesto a servir a empresarios digamos ambiciosos, se conjugan para plantear medidas que teniendo buena apariencia son perjudiciales para la población.
El SOAT Médico es una de ellas.
Todos recordamos la terrible equivocación que un par de médicos tuvo con un humilde anciano en el Hospital Sabogal. Siendo esta una desgracia personal la noticia fue sobreinformada, en radio, prensa escrita y televisión, donde se le preparó hasta especiales. No tengo la menor duda que no sólo fue el afán noticioso sino también crear opinión favorable al proyecto de creación del SOAT Médico.
El ex director de El País de España, Joaquín Estefanía, decía que para crear corrientes de opinión se tiene que "levantar" la noticia, lograr que la comenten algunos especialistas y consagrarlas con alguna encuesta de opinión.
Ese ciclo se ha cumplido escrupulosamente con el SOAT Médico. A partir de la negligencia del Sabogal se levanta la noticia, opinan "especialistas", la población se sensibiliza, viene la encuesta favorable y luego sale Alan García a decir el pueblo quiere SOAT Médico.
Lo cierto es que este SOAT Médico sólo beneficiará a las empresas de seguros y perjudicará al pueblo. Los médicos encarecerán sus servicios, no se arriesgarán a operar si no tienen todo lo necesario, se acabará la filantropía y la solidaridad, los médicos trabajarán a la defensiva lo cual se agrava con una población que culturalmente estará dispuesta a echarle la culpa al médico por cualquier cosa que considere anómala. Se encarecerá la atención médica y se perjudicará terriblemente a la población, sobre todo a la más necesitada.
En El Perú hay médicos de primer nivel, sacrificados y entregados a nobles causas. El problema del Sabogal tiene que ver con el criterio de producción industrial que el directorio de ESSALUD le ha impuesto a los médicos. Sin interesar las condiciones se les exige un número de operaciones al mes, una cantidad de consultas, etcétera. No interesa la calidad sino la cantidad, la cuota, la meta numérica.
Finalmente ¿Por qué el apuro del gobierno? ¿Por qué acelerar un proyecto que merece mayor discusión y reflexión?
El Congreso de la República debe actuar con firmeza ante esta arremetida de los lobbistas que al parecer influyen mucho en el Ejecutivo. Los congresistas deben defender su fuero y pensar en los intereses del país y no de un inescrupuloso sector económico.
1 comentario:
Señor Sheput:
1. Resulta más que sospechosa la actitud del señor García al tener tanto interés en este SOAT.
2. ¿Tanto le preocupan los errores médicos? Ya se ha hecho un estimado de lo que se pagaría versus lo que ganarían las aseguradoras y es realmente escandaloso. No hay proporción ni equilibrio.
3. Usted apela al Congreso, pero ¿realmente podemos confiar en él? En conclusión: hemos tenido un gobierno de faenones a cambio de no tener a Humala de presidente. ¿Fue un buen negocio? Tal vez para la CONFIEP sí lo ha sido. Para la moral de nuestro pueblo no.
Muchas gracias.
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